miércoles, 9 de diciembre de 2009

El sueño del funcionario público

Los besos deberían bajarse del árbol
y echar sus raíces perpetuas
a morir
para saber
a qué atenerse cuando duelan
en la memoria cuando el mármol
se coma al sueño
y las cosas se paralicen
y pase el tiempo de roca en roca
como todos los años que se mueren sin feriados

1 comentario:

Jose Miguel Adaros dijo...

Que intenso, me gustó, aunque está lleno de nostalgia, bienvenido al club, ja! un abrazo amigo mio